11.9.07

Querido hermanito

Agradecemos al Moré Gabriel Duer por tenernos siempre presentes y enviarnos material para la página.

Voy a pedirle un favor a usted que está leyendo esta carta que estoy escribiendo con mis últimas fuerzas. Mi vida ya pronto va a acabar, me quedan pocas horas y necesito dejarle un mensaje a mi hermanito que todavía no ha nacido. No llegará hasta que yo me vaya, así es nuestro destino: no nace el nuevo hasta que el anterior... Bueh, ya sabe.

Pero perdón, aún no me presenté. Soy el año 5768. Sí, ya nos conocemos, vivimos juntos todo este último año. Mi hermanito que esta por nacer es 5769, y es a él al que necesito dejarle este mensaje:

QUERIDO HERMANITO:

Hace 355 días pasé por lo que vos estas pasando en estos momentos. Recuerdo que nací con tantas esperanzas, con la seguridad que durante mi vida llegaría la tan ansiada Gueulá (Redención), que los Iehudim verían por fin al Mashiaj tan esperado y se sanarían los enfermos, que las guerras desaparecerían y que el dolor no existiría, que la dulzura florecería como la hierba, que la paz, justicia y abundancia serían cosa de todos. Tantas cosas pensé y sentí en esos días.

Todavía recuerdo cómo se conmovían los Iehudim al escuchar los sonidos del Shofar y recibían sobre ellos la Teshuba. La Teshuba, llave de todos los cofres de la felicidad. Se decretaban tantas cosas buenas. Y a los pocos días: ¡Kipur! Más Iehudim aún venían para conseguir el Perdón Celestial. Todos ayunaban y rezaban todo el día.

Pero las cosas no sucedieron como yo las pensé. Pasaron los días, las semanas, los meses y muchos de los compromisos asumidos en Rosh Hashana y Iom Kipur no se cumplieron. Tantas veces me enojé: no te quiero contar, hay cosas muy pero muy tristes. Me voy llevando cicatrices de la Vida que son muy dolorosas pero la idea de escribirte no es para contarte cosas tristes sino para darte ánimo. Se dice que están llegando los últimos tiempos, Los Tiempos Finales. El mío no fue el último año pero el tuyo si podrá serlo, porque llegará un año en el que los Iehudim haran ese esfuerzo y tomarán estas decisiones.

Ya están muy cerca de lograr su cometido:
• ¿Sabés cuantas familias ya comen Kasher? ¿Sabés lo que eso significa? Están cambiando sus Vidas. Están buscando cumplir con el mandato de Hashem a pesar de sus dificultades.
• ¿Y cuántos respetan el Shabbat? Eso sí que es un desafío. Seguramente la recompensa no tardará en llegar.
• Cuántas parejas observan la Pureza Familiar. Esas familias ya respiran otro aire: la pureza flota en el ambiente.
• Ya casi no quedan personas, sin distinción de sexo ni edad, que no dediquen un tiempo, poco o mucho, en el día para el estudio de la Torá. Seguro que sabiendo el camino por donde se llega a la meta, lo van a lograr.
• Con todo lo que te estoy contando de los Iehudim es más que seguro que este año se va a dar lo que hace tanto tiempo esperan. Por eso te escribo, para bendecirte, para desearte que durante tu vida todo sea alegría, que llegues a cumplir tu ciclo sin golpes ni heridas. ¡Bastante ya recibí yo! Seguro que la cuenta ya está cubierta.

QUERIDO HERMANO: el tiempo se me está acabando, debo despedirme. Te deseo lo mejor, que seas muy feliz y que en ti todos sean felices. Que tus días sean de dicha y alegría, que en ti se cumplan todos los sueños de todos los años anteriores. Y por último que con orgullo se hable de ti: 5769.

Y a usted, que me leyó tan atentamente quisiera pedirle un último favor:
CUIDE A MI HERMANITO.

De usted depende que crezca sano y lleno de felicidad.
Esa felicidad será también para usted y los suyos. Disfrútelo y sinceramente : gracias por todo.

¡Chau!

Firma: 5768

Quería compartir con ustedes esta carta redactada por el Rab? David Bassul y desearles Shana Toba u Metuka.

Gabriel Duer

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy lindo maise. Ishkoiaj
cuando sale Fabrengen??

Besos
Eze